12.5 Depresion

Depresion como causa/consecuencia de la obesidad

-La depresión puede ser una de las causas de la obesidad. Ingerir alimentos despierta nuestro sistema parasimpático, que nos hace sentir tranquilos, plácidos y a gusto, lo que mejora en alguna medida la sensación de desamparo que tiene la persona depresiva.

Las personas depresivas no suelen tener fuerzas ni ganas para realizar ninguna actividad. El hecho de no tener energía para realizar algun deporte hace que su estilo de vida sea muy pasivo. Para ellos el hecho de dar un simple paseo puede parecerles un reto que no se ven con fuerzas para afrontar. De hecho, muchos depresivos padecen un cansancio y sueño excesivo y pueden dormir más de doce horas diarias, por tanto, su consumo de calorías es muy bajo. Si a esto le sumamos que algunas medicaciones para el tratamiento de la depresión producen un aumento considerable de peso, encontramos mayor posibilidad a contraer obesidad.

-La depresión, además de ser causa puede ser tambien una consecuencia. Las personas obesas sufren rechazo social, su autoestima suele ser baja debido a su aspecto físico, tienen más dificultades para encontrar pareja o trabajo y suelen criticarse y castigarse con pensamientos negativos y destructivos. Todos estos problemas pueden hacer caer a la persona en un estado depresivo.
La manera para salir de esta situación es obligar a la persona a ir aumentando su actividad fisica progresivamente, regular los habitos de sueño (durmiendo un máximo de ocho horas diarias), regular las comidas, la higiene personal, las tareas de casa…